La startup guipuzcoana de eye-tracking Irisbond con sede en San Sebastián, ha sido la ganadora del Premio Adegi a la Nueva Empresa de Gipuzkoa 2023. Un premio que reconoce el potencial crecimiento de las jóvenes compañías nacidas en Gipuzkoa con una antigüedad menor de 10 años.
La tecnológica premiada nació en 2013 a partir de una investigación en el campo del software de visión artificial desarrollada por el centro tecnológico Vicomtech, que los hizo pioneros desde su nacimiento. Su propuesta fue desarrollar un sistema de control del ordenador a través de la mirada denominado eye-taking dirigido a personas que tienen movilidad reducida y dificultad en el habla. Lo que lograba es que a través de la mirada estas persona pudieran manipular el ordenador, lo que les ofrecía la posibilidad de comunicarse con el exterior y realizar tanto actividades laborales como lúdicas.
Tras diez años de recorrido y decidida apuesta por llevar su tecnología al mercado, hoy día Irisbond se define como una empresa innovadora que crea tecnología con propósito. Su tecnología ha aportado en el sector de la salud nuevas máquinas para diagnosticar antes y mejor, para tratamientos más precisos y eficaces y, en los laboratorios, mayor facilidad para encontrar el origen de las enfermedades y la solución o el desarrollo de nuevos medicamentos. Todo esto ayuda a que los profesionales de la salud trabajen mejor y nos aporta calidad de vida. Y también salva muchas vidas.
Por ejemplo, la Inteligencia Artificial y el machine learning pueden mejorar el diagnóstico y éxito de tratamientos, de manera cada vez menos invasiva. Aprender con cantidades enormes de casos anteriores en los que se analiza mucha información para entender cuáles son las claves del éxito en los diferentes pacientes.
Otro ejemplo, el seguimiento del movimiento de los ojos (o eye- tracking), que ha despertado mucho interés en el campo de la salud en los últimos años porque se ha demostrado que es una herramienta que puede funcionar como cribado para el diagnóstico de enfermedades psicológicas, neurológicas o de la visión y el tratamiento de muchas afecciones tanto para personas mayores como niños: autismo, dislexia, afasia, anomia, deterioro cognitivo, esquizofrenia, estrabismo, Parkinson o Alzheimer, entre otras.
Entres sus hitos recientes, en el 2022 anunciaron haber logrado la certificación Made for iPad por parte de Apple para su producto Hiru, el dispositivo de eye-tracking interactivo. Se trata del primer dispositivo de eye-tracking que funciona indiferentemente, con la misma precisión y facilidad de uso en iPads (iPadOS 15 o posteriores), y dispositivos Windows.
Esta certificación por parte de Apple, y en base al éxito de IRISBOND en el mercado europeo, acompaña la expansión a Estados Unidos. Sus soluciones de eye-tracking están presentes en 36 países en Europa, Sudamérica y Norteamérica a través de su red de distribución. Y por consiguiente la cifra de negocio incrementa anualmente la esperanza de que esta compañia se convierta en lider mundial en su nicho de mercado.
Por todo ello, el jurado del Premio ha fallado otorgarles este reconocimiento en forma de premio a su trayectoria. Proyectan Gipuzkoa y son un claro exponente de compañía con un ADN #BornGlobalInGipuzkoa.
Es importante recordar antes de terminar qué es el premio y porqué existe.
“¿Por qué existe este Reconocimiento?: “Lo que hacemos es lo que somos”. Esta afirmación es el punto de partida del Foro de Emprendedores de Adegi. Nos gusta y nos sentimos identificados con ella ya que recoge nuestra orientación a la acción. Una acción basada en la reflexión, pero acción al fin y al cabo. Creemos en la responsabilidad que tenemos los emprendedores ante la sociedad para estimular una nueva cultura empresarial centrada en las personas, y fomentar nuevos valores basados en la ética, la transparencia y la cultura abierta al mundo, la integridad y honestidad, la confianza y el trabajo bien hecho. Responsabilidad también para cambiar el mundo en que vivimos, promoviendo los valores y las actitudes emprendedoras en la educación de los jóvenes.
Y estamos comprometidos y orgullosos de desarrollar nuestra actividad empresarial en nuestro territorio, en Gipuzkoa. Por todos estos motivos, y con el objetivo de reconocer el trabajo bien hecho de muchos emprendedores que apuestan por Gipuzkoa, convocamos este reconocimiento. Para transmitirles nuestro apoyo y agradecimiento por su gran trabajo, por su apuesta diaria para contribuir con hechos al desarrollo de la sociedad en la que vivimos”
En el video se recoge el momento en que su fundador y CEO, Eduardo Jaureguirecoge el premio acompañado de parte de su equipo directivo. Los cuatro representantes de la compañía hicieron una intervención tan emotiva como inspiradora. Broche de oro que redondeó el especial momento de la entrega del premio.
Zorionak benetan equipo Irisbond egiten dezuen guztiei!! Aupa Zuek!!
Iranzu Sainz de Murieta, profesional enamorada de la Innovación Social, es cofundadora de Sinnple. Se dedican a diseñar herramientas empresariales que sirvan de catalizador para conseguir un nuevo modelo de empresa: La centrada en las personas y la consecución del triple impacto: Económico, social y ambiental.
Su otra pasión son los emprendedores sociales. Según Iranzu “ellos sí que suponen una revolución en el mundo empresarial”.
Eduardo Jauregui, cofundador de la startup Irisbond (desarrolladores de tecnologías de comunicación asistida). Se trata de un proyecto basado en un producto tecnológico dirigido al mercado social de la alta discapacidad.
Eduardo es un caso espectacular de determinación y capacidad de gestión empresarial. Saber que su modelo de negocio mejora la vida de un colectivo de personas con grave discapacidad como son los enfermos del ELA y la parálisis cerebral…, es el norte de su “brújula profesional”. Sin que sea óbice para que se desvíe ni un ápice del concepto de “sostenibilidad y escalabilidad” que necesariamente guía el crecimiento de su proyecto. De otra forma, nunca hubiese logrado el apoyo de un grupo inversor privado (además del público como son la Diputación de Gipuzkoa, Fomento San Sebastián y la SPRI), que como es lógico miden su inversión en métricas tanto de retorno económico (esencialmente) como de impacto social. No hay inversión en proyectos que adolezcan de falta de modelo de negocio escalables. No son invertibles.
Manu Alberdi, Project Manager del Grupo TTT. Los orígenes del grupo se remontan a la constitución de una pyme familiar fundada hace 50 años en el sector de los servicios industriales de tratamientos térmicos de superficies y recubrimientos. Enseguida supieron que hacía falta de una de una gerencia y equipo de dirección dinámicos que entendieron que la mejora continua de procesos, inversión en la I+D+I y crecimiento para abordar su internacionalización era vital para su supervivencia. El cuidado de las personas y la innovación en su gestión experimentando ideas avanzadas no exentas de riesgo ha sido otra de sus señas de identidad. Pilares en la consecución de hitos de éxito (con algunos fracasos también, inevitablemente).
En todo caso, son los que ponían el toque más realista al encuentro, en el sentido de experiencia y aprendizajes obtenidos a lo largo de los años.
El reto realmente era poder hablar de todo esto tan serio con las señas de identidad #AupaZuek: “dinamismo que se impone sobre el debate profundo de las ideas, cercanía que prima lo ameno y agilidad desenfadada que premia el ritmo de las intervenciones y la interacción con el público”. Al mismo tiempo, no caer en la superficialidad del tratamiento de la temática elegida es el otro gran objetivo.
¿Misión cumplida?
¡A mi modo de ver sí! Pero la opinión que cuenta es la vuestra, quienes nos acompañasteis en el encuentro. Nosotros en todo caso estamos muy contentos con el signo de las opiniones recibidas. Escucharemos con gusto las que nos queráis hacer llegar, la autocomplacencia nunca es buena compañera de viaje.
Os dejamos el video resumen del encuentro y las fotos, con las presencias y los testimonios de nuestros protagonistas.
Una vez más, gracias a la gente de Keler por portarse tan bién y ayudarnos a que estos encuentros se desarrollen en un espacio tan atractivo. Y por supuesto a Elisa (gran tiradora de cañas), Beñat y Erik (Keler) y Edu (Bengoa). Al igual que todos nuestras amigas y amigos que estuvísteis con nosotros. Sois estupendos!!
Vamos a por el tercer y último evento #AupaZuek del 2015. Con un tema, muy, muy candente, que curiosamente empezamos a gestar unos meses antes del fraude/escándalo Volkswagen. Bajo el título de “Innovación Social Empresarial: Ni perroflautismo ni postureo bienintencionado” os invitamos a encontrarnos en el espacio Keler para desarrollar nuestro particular formato de charla con tres protagonistas locales en el campo de la innovación social empresarial. A saber:
Iranzu Sainz de Murieta.– Co-Fundadora de Sinnple (consultores de Innovación Social), con una amplia experiencia sobre innovación social aplicada a la empresa y RSE.
Eduardo Jauregui.– Co-Fundador de la startup Irisbond (desarrolladores de tecnología de comunicación asistidas), realiza una fantástica labor facilitando su tecnología “eyetracking” a enfermos con graves discapacidades motrices como las personas que sufren E.L.A.
Manu Alberdi.– Project Manager Grupo TTT (pyme industrial con 50 años de historia en tratamientos térmicos y superficiales), que se ha caracterizado en su historia por su acción emprendedora y grado de innovación en producto y gestión de personas.
El objetivo en esta edición no es otro que hacer visible un nuevo modelo de empresa centrada en el triple impacto: económico, social y medioambiental. Tres personas con distintas trayectorias, enfoque y modelos de negocio, pero con una misma finalidad. Se creen el concepto de innovación social aplicada a la empresa, como elemento troncal e inherente a la generación de beneficio empresarial, yendo más allá del concepto hasta ahora conocido de responsabilidad social corporativa.
Y se rebelan frontalmente contra una suerte de estado de opinión (en algunas empresas y fuera de ellas) que cree que estas cosas son puro “perroflautismo más o menos ilustrado, o buenismo disfrazado de postureo empresarial”. Están convencidos que ser éticos es la mejor forma de generar “business” y nos lo quieren demostrar con sus personales historias profesionales. A nuestro estilo. Intervenciones dinámicas, desenfadadas y directas a la esencia.
Iranzu basará su relato en su historia personal de una ingeniero que se centró en el campo de la innovación tecnológica, para posteriro decidir por convicción emprender en el campo de la innovación social. Su especial sensibilidad y compromiso en este campo le llevó a escribir desde las entrañas este certero y duro posta raíz del caso del fraude medioambiental cometido por el fabricante de coches Volkswagen, cuya dirección se dejó llevar por su estúpida codicia y falta de ética.
Eduardo Jauregui, ingeniero igualmente de formación quien tras una etapa al frente del departamento de I+D de una multinacional decide emprender con un proyecto basado en un producto tecnológico dirigido a un mercado social: La alta discapacidad. Sus dos últimos años han sido trepidantes de hitos y reconocimientos, como ha sido la reciente obtención del premio Reina Sofía de Tecnologías para la Accesibilidad. Compartirá con todas y todos nosotros su visión en este campo.
Manu Alberdi, project manager del grupo industrial TTT. Trabaja directamente con la dirección general en transformar la gestión de personas y por tanto la cultura de la empresa con la aplicación de conceptos de gestión socialmente innovadora. Podríamos decir que este grupo ha venido realizando innovación social empresarial “casi sin ser conscientes de ello”. De hecho, ha guiado su estrategia y forma de actuar desde los inicios.
Actualmente están implicados en la medición del impacto social y ambiental de la empresa, definiendo acciones concretas de mejora en aspectos como procesos de fabricación (compra responsable, ecodiseño, impacto medioambiental..), así como fórmulas de flexibilidad horaria deseadas por los trabajadores, equidad salarial y mantenimiento del empleo.
De todas estas cosas nos hablarán. Con unas cañas por supuesto, y un estilo de comunicación cercana. Nos encantará veros y compartir ideas y experiencias con aquellos que decidáis asistir al evento. ¡Tenemos mucho que contarnos!
Reproducimos aquí la entrevista a Eduardo Jauregui, miembro del Foro de Emprendedores de Adegi, realizada y publicada por el Diario Vasco.
Eduardo Jauregui, Fundador de Irisbond.Dio un giro de 180º a su vida al adoptar un desarrollo tecnológico para convertirlo en negocio. Hoy aspira ya a ser líder en su sector.«Vi claro que teníamos que salir cuanto antes al mercado con un producto, aunque no fuera perfecto»
Hay momentos en la vida en los que todo puede cambiar de golpe, y a Eduardo Jáuregui uno de esos le llegó hace menos de dos años, cuando tomó la decisión de apostar todas sus cartas, las del presente y del futuro, a una idea de negocio. Él nunca había sido empresario. De hecho, llevaba varios años en puestos de responsabilidad en multinacionales, pero siempre por cuenta ajena. Hasta que un buen día esa fase terminó. Y decidió tomar otro rumbo. Hoy, a este ingeniero nacido en Donostia en 1970 aquellas cartas que puso sobre la mesa le sonríen. Su empresa entró gateando en el mercado hace sólo año y medio, pero ha cogido tal impulso que ya camina de pie y acumula reconocimientos.
Con el nombre de Irisbond, comercializa un dispositivo que permite controlar un ordenador con los ojos. Su destino inicial eran las personas afectadas por la discapacidad (ELA, paraplejía…), pero ya se ha abierto camino en el mundo industrial y en las aplicaciones médicas y científicas.
– Trabajaba para una multinacional.
¿ En qué momento salta al mundo del empresariado?
– Bueno, más bien me hacen saltar. Yo estudié ingeniería en Tecnum y trabajé en una empresa de componentes electrónicos durante doce años. Fue una experiencia fantástica en la que me fui curtiendo como profesional, viajé bastante y poco a poco fui cogiendo cada vez más responsabilidades hasta asumir el departamento de ingeniería. Pero después decido dar el salto a una multinacional que buscaba un director de I+D y que cuatro años después llevó a cabo un proceso de reestructuración en el que empezó a prescindir de mandos intermedio. Y me tocó a mí también. Así que me planté en noviembre de 2011, con 41 años y tres críos en una situación que no te esperas, porque con una carrera y una trayectoria laboral continuada te imaginas la vida como muy resuelta…
– ¿Y qué es lo primero que hace?
– Coger oxígeno y apostar por la formación para volver a tomar perspectiva. En su día había hecho un MBAmientras trabajaba y, además, a través de Adegi y diferentes formaciones, intenté contactar con empresas. Pero claro, me encontré con un panorama malo. Hablamos de los años 2011-2012; plena crisis…
– La verdad que eran años muy malos, ¿y qué le ayudó?
– Para mí fue fundamental no perder la conexión con el mundo profesional, seguir formándome, mantenerme en el circuito de contactos…Y, en ese proceso, cumplí el año y pico sin trabajar y, aunque estaba formándome y reciclándome, sentía que tenía muchas ganas de hacer cosas. Y entonces contactaron conmigo a través de la ESTE hablándome de este proyecto, de una tecnología para manejar el ordenador con los ojos, un desarrollo tecnológico que había llevado a cabo el centro Vicomtech-IK4 durante cinco años y que, en 2012, estaba terminado y requería de un promotor que le diera un modelo de negocio y que lo sacara al mercado. Y así acabé en el mundo del emprendimiento.
– Venía de un mundo muy diferente, vaya cambio…
– Sí, y después de trabajar siempre por cuenta ajena, con una cierta seguridad entre comillas de tener un sueldo a fin de mes, te metes en una nueva dimensión desconocida, pero también muy atractiva. Obviamente le di muchas vueltas. Es un tema no solo profesional, sino familiar, porque es una apuesta de familia y mi mujer en este caso ha sido clave para poder tirar para adelante.
– ¿Y qué tal? ¿Cómo le resultó gestionar una empresa?
– Bueno, obviamente la experiencia que tuve en el pasado me ayudó mucho a tener una proyección y de alguna manera a saber cómo funciona el mundo empresarial y dónde poner los esfuerzos realmente.
– ¿Y dónde hay que ponerlos?
– Yo tenía muy claro que teníamos que salir cuanto antes al mercado con un producto. Es decir, el producto tiene que testarlo el mercado, el propio usuario. Más vale algo a medias pero que salga, que no hacerlo por intentar conseguir lo perfecto… Lo perfecto es enemigo de lo bueno, esa es una máxima que yo creo que es muy útil en todo a lo largo de la vida. Decido que hay que impulsar un producto muy sencillo, es decir, lo que vendemos es una tecnología muy innovadora que permite controlar el ordenador con la mirada, pero su manejo es muy sencillo, útil y muy intuitivo. Para que sea vendible, cualquier persona del mundo tiene que poder ser capaz de controlar el ordenador conla mirada aunque no tenga ningún tipo de conocimiento informático. Y además, como teníamos claro que el objetivo era el mercado global, decidimos hacer las primeras pruebas del producto fuera de aquí, en Argentina y Venezuela.
La cara humana
«Quiero que la niña se ponga hoy las mallas rosas » . La que habla es una mujer afectada por ELA que en realidad no puede hablar, porque no le es posible articular palabras. Sentada frente a un ordenador da la orden mediante sus ojos para que una voz automática diga en voz alta lo que ella ya no puede decir. Comunicarse con su hija es algo que ha conseguido gracias al dispositivo de Irisbond «Estamos ayudando a personas que mantienen sus capacidades cognitivas pero que no pueden comunicarse, que es lo más frustrante que hay», dice Jáuregui mientras muestra el vídeo de la mujer. Se da la circunstancia de que su empresa, integrada por cuatro trabajadores y dos colaboradores, sobrepasa el ámbito estrictamente empresarial para inmiscuirse de lleno en las necesidades de las personas afectadas por la discapacidad.
– Vamos, que pese a ser una empresa la parte de ayuda social pesa…
– Cuando lanzamos la empresa teníamos muy claro que era un negocio y que debía generar beneficios, pero también teníamos claro que suponía un impacto social indudable, que generaba el compromiso moral de buscar soluciones para que cualquier persona que necesite un dispositivo para comunicarse lo pueda hacer con independencia de su condición económica. No es un equipo caro, lo estamos vendiendo por 1.800 euros, pero todavía hay gente que no puede permitírselo. Lo último que hemos hecho es reunir a la mayoría de asociaciones de ELA de España, firmar un documento conjunto y presentar en el Ministerio de Sanidad una petición oficial para que incluya dentro de la cartera de servicios comunes este tipo de dispositivos.
– Por cierto, quieren ser líderes en este tipo de tecnología ( Eye tracking), pero compiten con un gigante sueco…
– Somos los únicos en España que hacemos esto y es verdad que competimos con Suecia, pero nuestra tecnología no es peor que la de ellos y eso también tenemos que hacerlo valer. Es una cosa que nos falta a los guipuzcoanos a veces, ese carácter bilbaíno de hacernos valer, porque aquí se hacen las cosas muy bien.
Ambos premios de gran prestigio y potencial impacto en el devenir de esta joven empresa creada a partir de un desarrollo tecnológico ideado por Vicomtech (Red vasca de ciencia y tecnología) que el notable emprendedor Eduardo Jauregui (socio inversor y CEO) está liderando para convertirla en una compañía tecnológica global y rentable con alto potencial de crecimiento.
Para ello, además del soporte del Centro Tecnológico Vicomtech (socio fundador), Eduardo se acompaña deIosu Arizkuren en calidad de Director Técnico (CTO). Ambos componen un equipo reducido, ágil y comprometido, que deberá seducir al mercado con un desarrollo tecnológico basado en tecnologías de visión artificial y técnicas de Eye Tracking que permiten a un usuario poder controlar su ordenador con el movimiento de sus ojos.
El sistema en su conjunto presenta una parte de desarrollo hardware consistente en un reducido dispositivo de conexión USB que se sitúa debajo de la pantalla del PC o portátil y una aplicación de software. El hardware emite haces de luz infrarroja invisibles e inocuos y mediante videocámara, registra los destellos que producen en la córnea del usuario. La información se traslada al ordenador, y la aplicación de software la convierte en coordenadas de posición del ratón en la pantalla. La comercialización de este desarrollo lo hacen bajo la marca Irisbond Primma cuyo video explicativo lo podéis ver aquí.
Irisbond Primma está diseñado especialmente para personas con problemas de movilidad severos, como afectados por Esclerosis Lateral Amiotrófica o parálisis cerebral, y es compatible con otras aplicaciones de software libre. Así el usuario puede escribir correos electrónicos, chatear, jugar a videojuegos o controlar dispositivos electrónicos situados en la habitación que sean compatibles con el sistema. En este otro videose puede ver un ejemplo de caso real de un usuario que es enfermo del E.L.A. usando el ordenador para comunicarse con otras personas.
Eduardo Jauregui se halla en este momento trabajando con intensidad en dos vectores. El primero, abriendo el mercado internacional viajando, estableciendo acuerdos comerciales con distribuidores y clientes en los que apalancarse, así como participando en ferias de referencia y conociendo de primera mano a su competencia. Para ello ha sido fundamental el préstamo participativo luzaro obtenido de la SPRI (Gobierno Vasco) que les ha dotado de un mínimo de caja para acometer primeras inversiones y gastos de expansión internacional.
Y el segundo, no menos importante, cerrando una ronda de inversión importante con capital riesgo público-privado (Capital Riesgo País Vasco y Everis) que le permita el dimensionamiento y estructura suficiente para acometer los hitos de venta y crecimiento estimados.
“La buena noticia es que en ambas actividades las cosas están yendo bien” nos dice Eduardo. “es verdad que la competencia es muy fuerte y los players muy potentes, pero nuestra ventaja competitiva en coste de producto, calidad de la tecnología e idioma (única en español) nos posiciona con claras fortalezas que el mercado nos está reconociendo”.
Una baza de negocio muy importante de Irisbond a medio plazo va a provenir del sector industrial. Según Eduardo “las tecnologías de eye tracking tienen virtual aplicación en los entornos industriales, sustituyendo procesos manuales ejecutados (con dificultad) por operarios a otros que puedan ser ejecutados con la mirada”. Éste es un camino que el equipo Irisbond ha comenzado a trazar, de la mano de la mejora del producto, ajustando su propuesta de valor a la detección de problemas y/o mejoras de procesos en la industria con soluciones innovadoras soportadas por esta tecnología. Un nicho de gran futuro que precisará de todo su talento.
No puedo terminar el post sin detenerme un instante en el perfil emprendedor de Eduardo. Muestra un camino muy interesante de cómo pueden surgir las mejores historias de nacimiento de startups de alto potencial de crecimiento en nuestro territorio, y por ello quería reconocérselo en este humilde post. El relativo éxito de la iniciativa Irisbond no se entiende sin la aparición de Eduardo. Un desarrollo tecnológico de estas características, gestado en el seno de un Centro Tecnológico, no tiene ningún alcance si no es asumido y liderado por un (mejor varios) emprendedor preparado, con la experiencia y pasión necesarias para llevarlo al mercado consiguiendo para ello el capital inversor necesario. En este caso, Eduardo es un emprendedor maduro, curtido en la empresa como ingeniero responsable de I+D que habiendo sufrido las consecuencias de una operación de compra de su anterior empresa por una multinacional que le llevó al paro por amortización de todo el departamento de I+D que lideraba, decidió cursar un master que complementara su formación técnica con la de gestión empresarial y buscar activamente proyectos tecnológicos en el entorno de la red de ciencia y Tecnología Vasca que le gustasen lo suficiente como para emprender una aventura de este calado. Y vaya si lo ha hecho.