Entrevistas Emprendedores: Aritz y Juan (Deneb Medical): «Nuestra idea permitirá al cirujano operar en áreas que ahora no puede»

Aritz y JuanReproducimos aquí la entrevista a Aritz Lazkoz y Juan Arregui, miembros del Foro de Emprendedores de Adegi, realizada y publicada por el Diario Vasco.

Empresarios. Aritz Lazkoz y Juan Arregui. Deneb Medical trabaja en una aplicación que aporte más seguridada los pacientes enlas intervenciones quirúrgicas. «En Medicina las máquinas se usan para aplicaciones muy concretas. Queremos romper con esta idea».

Un proyecto innovador para el sector médico ha llevado a Aritz Lazkoz y Juan Arregui a redirigir su carrera profesional. Una iniciativa con mucho futuro en la que, de momento, únicamente ambos están inmersos. Pero en este camino, una de sus ideas a corto plazo está centrada en reforzar el equipo con ingenieros de telecomunicación o licenciados en Ciencias Físicas con experiencia en temas de láser de óptica y fotónica. Todo ello con la mente puesta en crear un sistema quirúrgico.

– ¿Cuál es exactamente el objetivo de su proyecto?

– Juan Arregui: Queremos desarrollar un sistema que el cirujano utilice con su mano, como cualquier otro instrumento, pero que también pueda robotizar y sirva para las intervenciones quirúrgicas.

– Aritz Lazkoz: Podríamos decir que será como un bolígrafo, pero con unas dimensiones mayores. Este instrumento tendrá componentes que permitirán que de su punta salga un láser para cortar tejidos y, a su vez, haga una discriminación de las áreas, diferenciando entre las zonas en las que el cirujano quiere intervenir y en las que no.

– ¿En qué puede ayudar?

– J.A.: Este sistema conseguirá que la cirugía sea menos invasiva y resulte menos dañina para el paciente. Además, no requerirá de un cirujano muy experto para utilizarla, ya que esa función de discriminación la hará más segura.

– A.L.: Nosotros queremos resolver algunos de los problemas que actualmente tienen los cirujanos a la hora de operar. Con este instrumento estos profesionales médicos serán capaces de llevar a cabo intervenciones que hoy en día no se pueden realizar o se hacen asumiendo un gran riesgo por parte del paciente.

– Tienen la intención de que su aplicación tenga un acceso universal. Sin embargo, este tipo de instrumentos suelen resultar caros y únicamente llegan a empresas con muchos recursos…

– J.A.: Inicialmente será caro, pero lo estamos desarrollando en una concepción de plataforma. La idea pasa porque este sistema no esté orientado únicamente a una disciplina quirúrgica determinada, sino que se pueda emplear para muchas. Empezaríamos por un área y luego iríamos añadiendo más.

– A.L.: En el mundo médico cada máquina está concebida para aplicaciones muy concretas. Nosotros queremos romper con esa forma de pensar y que un instrumento sirva para muchos usos. Entonces, un hospital con este aparato podrá resolver muchas funcionalidades y no necesitará de diversos instrumentos, por lo que su coste estaría amortizado.

– ¿Y en qué momento del proceso de desarrollo se encuentran?

– J.A.: Estamos en una etapa inicial. Nos centramos en identificar muy bien el mercado.

– A.L.: Nos encontramos en una fase con dos componentes. Por un lado, estamos estudiando las disciplinas quirúrgicas más interesantes por las que debemos entrar en el mercado. Y, por otra, queremos empezar a hacer un primer prototipo totalmente funcional.

– ¿Qué les llevó a investigar este sistema?

– J.A.: Nos conocemos desde la universidad y siempre hemos estado interesados en el emprendizaje y en hacer cosas nuevas. El mundo médico siempre nos ha llamado la atención, porque es una forma muy directa de ayudar a la sociedad. Apostamos por esta idea por su coherencia.

– A.L.: Hemos ido dando pequeños pasos que nos han llevado a valorar que este proyecto tiene sentido. Primero fuimos a Bic Berrilan (un espacio en el parque de Miramón, en Donostia, que ofrece asesoramiento en los procesos de creación de nuevas empresas innovadoras con base tecnológica) para mostrar el proyecto y ahí nos animaron a presentarnos al programa Ekintzaile. Hemos ido quemando etapas y obteniendo respuestas positivas que nos han ido enganchando a esta iniciativa.

– En los inicios del proyecto contaron con la ayuda Ekintzaile, ¿para qué la emplearon?

– J.A.: Nos sirvió para confirmar que técnicamente este sistema se puede hacer y para corroborar que nuestra idea puede ser útil para el sector médico.

– A.L.: Gracias a esta ayuda completamos un análisis de viabilidad técnica del proyecto que teníamos en mente. A su vez, nos permitió comenzar un análisis de mercado para conocer si el instrumento que queremos desarrollar despierta interés en el sector médico.

– Recientemente les han otorgado, de manera provisional, la ayuda del programa de Retos Colaboración 2015, concedida por el Ministerio de Economía del Gobierno de España.

– J.A.: Cuando nos lo dijeron nos hizo mucha ilusión, aunque todavía tienen que darse unos plazos para que la ayuda sea oficial. Ahora, tenemos mucho trabajo por delante para cumplir los objetivos.

– A.L.: Creamos un consorcio muy potente con un centro de investigación y una universidad para enviar un proyecto coherente a este programa. Esta ayuda nos permitirá, en un periodo de 30 meses, financiar el prototipo con todas sus funcionalidades y hacer los ensayos clínicos en animales.

– Además de subvenciones públicas, ¿han contado con otro tipo de apoyos para su proyecto?

– A.L.: Para llevar a cabo esta idea en la que trabajamos, estamos colaborando también con distintos centros de investigación, tanto del País Vasco como de fuera, para completar el proyecto con las mayores garantías. Por otro lado, hay gente que a título individual nos ha ayudado y hay que agradecer su contribución.

– ¿El haber ganado este año el Toribio Etxeberria en la categoría de Ideas y Proyectos Empresariales es una señal de que van por el buen camino?

– A.L.: Supone un espaldarazo al proyecto que estamos realizando, porque se trata de un premio muy importante a nivel del País Vasco. Ha servido para motivarnos y seguir en esta línea.

– J.A.: Este premio ha permitido que la empresa Deneb Medical empiece a darse a conocer. De esta manera, los candidatos a trabajar en esta empresa ya tienen una primera referencia de nosotros.

– ¿En todo este proceso les ha afectado la crisis?

– J.A.: Las instituciones públicas tienen menos dinero disponible, por lo que las ayudas al emprendizaje se han visto reducidas. Eso ha llevado a que los requisitos para conseguir estas subvenciones sean más exigentes que antes de comenzar la crisis.

– ¿Cómo hacen un paréntesis en este proyecto?

– A.L.: No me supone ningún trauma pensar en el proyecto, pero me gusta pasar el tiempo con mis amigos, mi familia y también hacer deporte.

– J.A.: Con este proyecto hemos ganado en calidad de vida. Le dedicamos muchas horas a esta idea, pero tenemos flexibilidad de horario. Dicho esto, me gusta estar con la familia.